En el Teatro maravillas, desde el 9 de enero al 28 de junio de 2026

MARGA y JAIME van a separarse después de 15 años de matrimonio. Entre lágrimas y reproches se consuelan sabiendo que, al no tener hijos ni mascotas y ni siquiera un coche en común, podrán marcharse sin más, dando un portazo con un clásico: “Yo ya no quiero nada tuyo”. Pero hay un pequeño detalle en el que no habían caído. Ese portazo hay que darlo con una puerta. Y esa puerta pertenece a una casa. ¡¡¡Y esa casa… es la casa de los dos!!!
Marga y Jaime están dispuestos a rehacer sus vidas por separado, pero ambos consideran que LA CASA les pertenece. Ninguno de los dos quiere marcharse del piso que fue su hogar. Y este mutuo desacuerdo no tiene pinta de resolverse con una separación amistosa.
Empiezan a sacar los trapos sucios y a echarse en cara mutuamente el fracaso de su relación. Ambos llegan a una conclusión: debería irse de la casa el que tenga más culpa de que se estén divorciando. Y ahora empezará la guerra de verdad. Ambos van a tirar de la manta y a sacar toda la mierda que tenían guardada debajo de la alfombra. Aquí ya no hay pudor, ni importa el que dirán… Una pareja abierta en canal. Con todas las vergüenzas al aire. Un matrimonio a la vista desde una enorme ventana indiscreta.

UNA COMEDIA SOBRE EL DESAMOR
MARGA y JAIME llevan 15 años juntos. Tiempo suficiente para haberse dado cuenta de que el “felices para siempre” suele convertirse, en el mejor de los casos, en un “felices casi siempre”… 15 años de amor que han convivido en armonía con 15 años de reproches. 15 años bajo un mismo techo, pasando del “daría por ti mi vida entera” al “esta noche te cambiaría por cualquiera”. 15 años de quererse mucho, trufados de rabia intercalada. De rabia sin rencor, de rabia cotidiana, rabia de mecha corta, rabia que acaba pareciendo una forma enfurecida de quererse. … En fin, 15 años de matrimonio, quien lo probó lo sabe… Marga y Jaime han decidido separarse. O quizás se van a separar pero en realidad no lo han decidido. Porque a veces los divorcios son como el amor, ocurren de repente, sin que nadie se lo espere. Salta una chispa y ‘chas’, aquello se acaba en un segundo, igual que empezó. El problema es que es igual, pero realmente no. Porque el “si te he visto no me acuerdo” es sólo una frase hecha. ¡¿Cómo no te vas a acordar?!… Aunque seas un ser de luz capaz de superarlo racionalmente gracias a que haces meditación trascendental levitando a 15 centímetros del suelo… ¡¡¡¿Cómo no te vas a acordar?!!!… ¡Si tienes 15 años de recuerdos arañándote el corazón! Te acuerdas en bucle de los mejores momentos y de los peores, y ninguna de las dos cosas te consuela ni te libra de la nostalgia y del desasosiego. Y al separarte después de 15 años te das cuenta de que tienes toda tu vida ligada a tu pareja: Los amigos, los vínculos familiares, algún negocio a medias, los restaurantes y los bares favoritos, los sitios de vacaciones, el barrio, los vecinos, un coche, o una moto, o al menos una bicicleta estática que lleva en desuso desde que terminó el confinamiento, y aquel cuadro carísimo que os regalaron en la boda, tal vez un perro, o un gato, o el terrenito que os comprasteis en el Valle del Jerte, … y sólo te da un respiro pensar en que ¡menos mal que no habéis tenido hijos!
Marga y Jaime tampoco tienen hijos, pero obviamente comparten muchas otras cosas, y están dispuestos a rehacer sus vidas renunciando a todas ellas menos a una: ¡La casa! La casa que fue su nidito de amor. Su Jardín del Edén del que ahora uno de los dos va a salir expulsado. Ahora tienen 21 días para resolver quién se queda con la casa. 21 días contados en 90 minutos, en los que Marga y Jaime pretenderán aclarar quién de los 2 es el culpable de este desamor. O tal vez estos 21 días/90 minutos son su última oportunidad para saber si aún queda alguna esperanza para su relación. Alguna esperanza para el amor.
Los espectadores del teatro van a poder asistir en directo a todas esas miserias que las parejas suelen mostrar sólo de puertas para adentro. Ninguno de los dos va a permitir que el otro se guarde nada. Aquí ya no hay secretos, ni medias verdades, ni pensamientos inconfesables, ni vergüenza ajena ni propia… ¡Que lo vean todo!

Un Matrimonio sin Filtros. Un Matrimonio sin Filtros que los espectadores van a poder contemplar a través de un cristal (o de un espejo).
Reparto: Marta Hazas y Javier Veiga
Horario: Miércoles, jueves y viernes: 20:00 h. Sábados: 18:00 h. y 20:00 h. Domingos: 18:00 h.
PUEDES COMPRAR TU ENTRADA EN EL ESTE LINK
Promotor del evento Teatro Maravillas – Salaberria y Tellechea Comunicación S.L. (B-82321654)






